me puse a pensar en dos personas, dos que se les hace evidente a simple vista la virtud, a mi criterio, más valorable quizá y hasta, ¿por qué no? casi más poderosa.
En ése eterno pelado que pretende hacerse pasar por antipático, pero la cara y sus acciones lo venden. Que se oculta viendo al mundo opaco, y que las inmensidades más grandes de la mente las reúne en un par de palabritas, en una simple frase.
O ése personaje siempre sonriéndole a todos, contando con un par pelos, que te resume cada sentimiento del corazón en un conjunto de palabras, un par de estrofas.
Querría ser ellos, pero con mis sentimientos. Que me sea tan fácil hacerle saber al mundo todo lo que tengo y guardo adentro de mí.
Volviendo a lo de virtud, no es una virtud de cambio, del revolucionar el mundo ni nada que se parezca, es una virtud de cada uno de nosotros para nosotros mismos, una ayuda que nos brindaríamos, una suerte de desahogo, o como le guste decir a cada uno.
Necesito tanto de eso, de tirar afuera todo lo que se acumuló dentro mío todo este tiempo. Emociones? para todos los gustos.. desde la peor mierda que se puede sentir por alguien, hasta el amor más grande, puro y sincero que siento.
Sí, es extenso a lo que te puede llevar pensar en un par de personas que tienen ese "no sé que", esa luz que te lleva a la admiración y las transforma en especiales para uno mismo.
Puedo estar hasta el aburrimiento escribiendo de A, de N, de comida, del tiempo, pero aunque no quiera darme cuenta el corazón se me transforma en un nudo cada vez más grande y se aprieta con más fuerza.
Si para no recordar el mejor remedio es soñar, ¿cómo hago yo? si mi sueño es lo que tengo que olvidar...
1 comentario:
Qué egoista.. ES revolución! en las mentes!
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